sábado, 13 de abril de 2013

206. El último aliento


"Camino de Santiago dando un rodeo del carallo" se estrenará el próximo 25 de abril en doble función en el teatro Villa de Móstoles. La sesión de las 12 h está completa por alumnos de otros institutos de Móstoles. La sesión de las 18 h está abierta a cualquiera que desee pasar un buen rato viendo cómo nuestros jóvenes tienen un potencial que se caga la perra.

Son las 0:23 de la madrugada cuando me dispongo con estas líneas. Mis retoñas duermen y se respira calma chicha en el hogar. Con la noche bien cerrada, una ligera duermevela invadiéndome y el olor a primavera asomando por mi ventana no puedo quitarme de la cabeza que el próximo 25 de abril verá la luz mi 6º musical desde que aterricé en el Rayuela, uno por año, ¡madre del amor hermoso! Ya tengo callo y bien pareciera que los nervios y la ansiedad no tuviesen permiso para asomar, y sin embargo lo hacen. Menos mal, porque creo que eso significa que sigo respetando lo que hago. Y otro año más diciendo lo mismo a estas alturas de la película: “este año es el último”. Pues eso, para no perder la costumbre: “este año es el último”. Eso sí, por primera vez en todo este tiempo me dispongo a reflexionar por escrito sobre la experiencia que supone antes de que vea la luz. Creo que resulta harto consecuente con el mensaje que intento darle a mis chicos: no importa tanto el producto final como el proceso que conduce a él. Dicho de otro modo, quiero ganar, no cabe duda, pero no de cualquier manera. Quiero hacerlo jugando bien. Me sobrevienen a la cabeza precipitadamente las primeras reuniones, las primeras expectativas, los cientos de emails cruzados por el camino, los cuadrantes de ensayos imposibles, los rostros frente al espejo buscando que no se pierda el paso, el palpitar de las músicas y de los corazones, el bocadillo a medio comer porque me toca bailar, las prisas, el que no llego, el que me regañan como falte, el temido ultimátum de Jaime, las sonrisas al final del día haciendo lo que más me gusta, lo que me saca de la rutina, de los problemas vividos y por vivir, lo que me insufla ese aire que necesito para seguir adelante...

Quiero que salga bien, ¡cómo no iba a quererlo!, incluso mejor que bien si es posible porque considero que se ha trabajado para que así sea, pero ante todo y sobre todo, independientemente del resultado, me quedo con la ilusión del camino, con el esfuerzo depositado tanto por los que han dirigido como los que han sabido dejarse dirigir, con el espíritu de equipo que ha reinado, con la convivencia de chicos y chicas desde 12 a más de 20 años durante unas sesiones de ensayos en las que como por arte de birlibirloque se borraba la fecha de nacimiento en el carnet de identidad para comportarse como un solo ente. El de Fuenlabrada con la de Móstoles. La de Getafe con el de Alcorcón. El de Leganés con la de Parla…

No me puedo olvidar tampoco de las dudas, de los llantos, de las lesiones, de los desalientos, de los nervios a flor de piel en algunas ocasiones, de más de un enfado y de más de una bronca, de los que no han llegado hasta el final por abandono voluntario o involuntario... Y no me puedo olvidar porque también forman parte del negocio que supone caminar. ¡No todo iba a ser de color de rosa!

Y soy incapaz de rescatar un solo nombre concreto, pues hace un rato, preparando el listado de los que estáis inmersos en este tinglado, me salen 102 almas sin contar la mía. ¡Cristo del Gran Poder, lo mío son las marabuntas al cubo y lo demás son tonterías! ¿Cómo entonces significar a uno solo pudiendo quedarme con agradecer a los 102 integrantes que me hayáis dejado conduciros hasta aquí? Pues eso, pase lo que pase: ¡GRACIAS A TODOS DE CORAZÓN!

Almasy©


LUAR NA LUBRE & ISMAEL SERRANO: "Chove en Santiago"